Asegúrate de que la parrilla esté bien caliente antes de colocar la carne. Esto ayudará a sellar los jugos y obtener una carne más jugosa.
Si no tienes parrilla de carbón, puedes utilizar una parrilla de gas o incluso una sartén grill en la estufa.
Si prefieres una carne más cocida, puedes cocinar el churrasco durante unos minutos adicionales por cada lado.